Liebherr: Preparados para los puertos del futuro
Los vaivenes en el sector marítimo están teniendo su reflejo en todas las industrias relacionadas directamente con él. Y los fabricantes de maquinaria portuaria no son una excepción. Factores como la exigencia de una mayor sostenibilidad por parte de los clientes, el continuo incremento de automatización o el tamaño cada vez más grande de los buques obliga a la industria a reiventarse de manera constante. Tras un año 2020 de grandes altibajos marcado por la pandemia, Liebherr busca asentar su actividad en 2021 logrando una cartera estable de pedidos.
- 04 mayo 2021 01:00
- Última actualización
03 mayo 2021 12:42
A pesar de la incidencia de la Covid, la compañía logró mantener el pasado año los compromisos adquiridos con diferentes operadores portuarios. Ejemplos como los sucedidos en los últimos meses en los puertos españoles de Alicante -del que informó en exclusiva Diario del Puerto- y, más recientemente, en Cartagena, son una buena muestra de ello.
Pero además de mantener los pedidos para 2021, Liebherr sigue dando pasos para adaptar su oferta de maquinaria portuaria a los retos a los que se enfrenta el comercio marítimo mundial: sostenibilidad, nuevas tecnologías y cambios asociados al cada vez mayor tamaño de buques y terminales portuarias.
En la actualidad, el fabricante responde a las necesidades de fabricación de sus clientes desde sus dos factorías situadas en Killarney (Irlanda) y Rostock (Alemania). En la primera, Liebherr continúa desarrollando y optimizando sus productos con características mejoradas de automatización, seguridad y productividad. Por su parte, desde Alemania la compañía se centrará en el corto y medio plazo en nuevos productos que se adecuen bien a esos retos.
“Es inminente un salto evolutivo en las grúas móviles portuarias que, además de la digitalización, también traerá nuevas mejoras y preparará la grúa para una mayor automatización”, asegura a Diario del Puerto Juan Carlos Jiménez, director de Grúas de Puertos de Liebherr Ibérica.
Juan Carlos Jiménez, director de Grúas Portuarias de Liebherr Ibérica. Juan Carlos Jiménez: “Es inminente un salto evolutivo en las grúas móviles portuarias que, además de la digitalización, también traerá nuevas mejoras y preparará la grúa para una mayor automatización”
La compañía ha hecho una gran apuesta por la electrificación de sus productos para reducir al mínimo sus emisiones. Sostenibilidad e innovación, área de crecimientoLiebherr fabrica grúas pórtico accionadas electrónicamente, por lo que las emisiones de este tipo de maquinaria se reducen a cero.
Los nuevos modelos RTG también se pueden accionar eléctricamente mediante bobinas de cables alta tensión, lo que elimina las emisiones locales y reduce el ruido. Asimismo, Liebherr ofrece trastainers híbridos que utilizan tecnología de almacenamiento de energía para reducir su consumo con motores diésel más pequeños.
Todas sus grúas de accionamiento eléctrico se pueden suministrar con una conexión de descarga, lo que les permite devolver la electricidad regenerada a la red.
La compañía instala además un amplificador de potencia híbrido, bautizado como Pactronic, que almacena el exceso de energía en un acumulador de presión y lo devuelve al circuito hidráulico cerrado cuando la grúa demanda la máxima potencia.Para Liebherr, “esta es un área de crecimiento activo y se están enfocando recursos significativos en esto para mejorar aún más”, tal y como afirma Juan Carlos Jiménez.
Algunos de los modelos de grúas STS de Liebherr tienen alcances de más de 70 metros. No todo va a ser gigantismoLa fabricación de grandes buques ha tenido como una de sus consecuencias la adaptación de la maquinaria portuaria a ese gigantismo. Liebherr lleva ya un tiempo haciendo los deberes en este campo, y de hecho algunas de sus grúas tienen alcances de más de 70 metros y alturas de elevación de 54 metros. “Sin embargo, existe una continua demanda de grúas de todos los tamaños. Las grúas para contenedores de Liebherr son conocidas por su longevidad y no es raro que nuestras grúas sigan funcionando después de 25 años”, puntualiza Jiménez, gracias a la alta calificación FEM de la estructura del acero.
Pero donde Liebherr ofrece un punto diferenciador en su servicio al cliente, gracias a su amplia red de mantenimiento y a la serie de actualizaciones y nuevos materiales que utiliza. “Contamos con un excelente servicio al cliente y suministro de repuestos. Además, ofrecemos un amplio paquete de modernizaciones y modificaciones logrando que las antiguas grúas para contenedores de Liebherr sean más inteligentes y una capacidad de operación mejorada, lo que permite a nuestros clientes aprovechar al máximo sus equipos Liebherr”, asegura Jiménez.
“En el futuro, nos centraremos en un mantenimiento más específico y orientado a la demanda de la grúa para aumentar la eficiencia de manipulación y la vida útil de los componentes”.
Desde hace 25 años, el fabricante trabaja en la introducción de sistemas de automatización para sus grúas portuarias. Camino hacia la automatizaciónLiebherr lleva utilizando cierto nivel de automatización en sus grúas para contenedores desde hace más de 25 años. Para las terminales que buscan avanzar hacia un panorama automatizado, la flexibilidad de Liebherr Automation Systems y la Liebherr Remote Operator Station permite continuar por fases o llegar a una automatización completa.
Con la automatización y el control remoto, un operador tiene la capacidad de supervisar varias grúas y solo intervenir cuando es necesario para cargas o elevaciones especiales.En ese sentido, desde la fábrica de Rostock, la compañía lanzará en breve una nueva evolución para las grúas móviles portuarias.
“El núcleo de esta evolución es la preparación para una mayor expansión de la tecnología de sensores y la digitalización general de la grúa”, adelanta Jiménez. “Esto significa que estamos creando las bases para poder ofrecer productos adicionales y más completos en el área de la digitalización y la automatización en el futuro”, asevera.
Desde la factoría de Killarney se construyó la última grúa STS que llegó a Alicante. 2020, un año de altibajosLiebherr no ha permanecido ajena a la crisis provocada por el coronavirus en 2020, aunque la recesión no ha golpeado tan duramente al fabricante como a otras industrias. A principios del pasado año, Liebherr contaba ya con una sólida cartera de pedidos arrastrada de 2019, una situación reforzada en el primer trimestre de 2020 con pedidos entrantes. No obstante, a principios del segundo trimestre la compañía notó una disminución en los proyectos.
Sin embargo, esos pedidos no se cancelaron, sino que se pospusieron. Liebherr logró mantener la producción gracias a un “cumplimiento estricto” de todas las normas de higiene y seguridad y al compromiso de sus proveedores, que siguieron suministrando materiales. Durante los meses más duros de la pandemia, y a pesar del decreciente comercio mundial, el servicio y soporte técnico del fabricante siguió trabajando, apostando por la cercanía con los clientes gracias a las herramientas digitales.
El cuarto trimestre supuso un punto de inflexión. “Vendimos equipos LHM en todos los continentes en el cuarto trimestre de 2020 y finalizamos el año con una entrada de pedidos ligeramente superior al nivel de 2019”, afirman desde la compañía. Andreas Müller, director de Ventas de Grúas Móviles Portuarias y Reachstackers de Liebherr asegura que “esto significa que Liebherr sigue siendo líder en el segmento de grúas móviles portuarias. Este desarrollo da motivos para el optimismo y proporciona una buena base para 2021”.