Menú
Suscripción

La belleza del progreso sostenible

Los viejitos nos repetimos en lo de contar antiguas batallas, ya me perdonarán. Recuerdo un día en una tertulia televisiva(televisión local, no confundir con la CNN), en la que me llamaron como tertuliano, aprovechando que para ese rol piden ninguna preparación. Un reputado periodista generalista, que los hay, hablaba de la tragedia que para él suponía eso de estar tomando una cervecita en alguna terraza del puerto y al levantar la cabeza ver lo que definió, literalmente, como “la guerra”, refiriéndose a una de las terminales de contenedores más próximas a la zona de ocio. No me quedó otra que saltar (si ya saben cómo me pongo, pa´ qué me llaman) y discutir eso de que se vea a nuestro sector como algo anti estético. Como indiqué en aquella ocasión, a mí me parece fascinante la estética de la coreografía logística. Me encanta. Incluso, como indiqué entonces, hay pintores que tienen a los contenedores como única temática de sus cuadros. No me han vuelto a llamar.

  • Última actualización
    05 junio 2020 11:06

No hay duda de que a algunos y algunas la logística les estomaga. Como ellos nos estomagan a nosotros. Está claro que, estomagantes aparte, cada cual puede opinar lo que quiera de lo que quiera, siempre que cumpla unas mínimas pautas de respeto, en función del contexto donde se exprese, que no es lo mismo el bar de la plaza que el Parlamento. También está claro que los que amamos este sector tenemos derecho a decir que nos fascina cada vez más la estética de nuestro mundo. Derecho a decir que los que tanto la atacan, generalmente, no tienen ni idea de qué es ni de cómo es la logística. Años llevo repitiendo que la animadversión que tiene parte de la sociedad a los puertos nace de la total ignorancia de lo que son los puertos. 

¿La solución? En cada obra planificada, en cada muelle reformado, en cada ampliación o nueva infraestructura portuaria, debería añadirse un paseo, un mirador. Sin contacto con la operativa, por supuesto. Que el ciudadano de a pie pueda contemplar en toda su grandeza el inmenso espectáculo de, por ejemplo, la llegada, operativa y salida del “MSC Sixin” o de tantos otros.

Operativa a bordo del "MSC Sixin", el pasado sábado por la noche en la terminal BEST del Puerto de Barcelona. Foto DP. Semejante espectáculo es algo que a buen seguro cautivaría a cualquier espectador. A mí me parece de una extraordinaria y muy original belleza el video del “MSC Sixin” conseguido por la APV, filmado, creo, por un práctico. Les confieso que pocas películas, además de El Padrino, he visto tantas veces y tan a gusto. Las inmensas magnitudes, los colores, las luces naturales y artificiales, el mar, el amanecer, el cielo… perdonen que me ponga ñoño, pero me parece que es una auténtica lástima que semejante espectáculo esté sólo disponible para la familia logística. Cuanto más se observa la coreografía multicolor de las terminales trabajando, más estética se les descubre.

En este país en el que se han cerrado de golpe las viejas opciones de futuro, ahí está, en todo su esplendor, la muestra rotunda de que seguimos contando con un sector logístico tan poco valorado, con tantas posibilidades de desarrollo y, para mí, tan espectacularmente bello.

Diario del Puerto ha vuelto a poner, también en estos tiempos tan jodidos, toda la carne en el asador, en busca de esas imágenes brutales de este súper gigante del mar. Y ahí están las fotos aéreas exclusivas que hemos publicado. “La guerra” que dirían algunos. La guerra al paro, me permito puntualizar. La guerra en defensa del progreso sostenible.   

En este país en el que se han cerrado de golpe las viejas opciones de futuro, ahí está, en todo su esplendor, la muestra rotunda de que seguimos contando con un sector logístico tan poco valorado, con tantas posibilidades de desarrollo y, para mí, tan espectacularmente bello.